Diálogos para activar


Documento 4

Presentación

En el marco de encuentros conversatorios, con diferentes actores de la comunidad local, buscando siempre la pluralidad de voces y la diversidad de miradas de nuestra realidad, en el marco del despliegue de la Ciudad Activa por los diferentes entramados locales (y también regionales) se generó un denominado denominado “Políticas de Suelo Urbano y Desarrollo Urbano Inteligente”, en Alberdi 1337 donde se encuentra la cervecería artesanal – emprendimiento local – “Lucre”.

Con la finalidad de dialogar con especialistas del sector, se debatió sobre la base de responder al interrogante de cómo construir una ciudad con inversión y acceso a la justa a hábitat. A la cita, carácter público y no arancelada, a los especialistas de la UNICENCONICET, Agustina Girado, Dana Valente Ezcurra y Alejandro Migueltorena; junto a ellos, la conducción de Patria Grande (concejal Mandato Cumplido) Juan Arrizabalaga; el secretario de la Cooperativa Falucho, también concejal Obligo Cumplido, Carlos Mansilla; cerrando el encuentro, el urbanista Juan Duarte, secretario de Hábitat de la localidad de Villa Gesell.

En Contexto

La realidad de la ciudad de Tandil, en materia de urbano – suelo en muy términos – amplios – se atravesa atravesada por situaciones de desalojo de predios ocupados, frente a un Estado apático y una comunidad desinformada al calor de la insensibilidad de la insensibilidad política del recinto deliberativo local; no es menor, que excepción al voto del Movimiento Evita, Nicolás Carrillo, la mayoría del HCD a favor de la eliminación de familias enteras, de una predio, genera debates en torno a los límites a la privada, la propiedad del Estado, la comunidad, la comunidad y los medios de los y los medios de difusión.

El epicentro del debate gira en torno al estado actual de Plan de Desarrollo Territorial del año 2005 (PDT), su implementación por estos tiempos y al déficit en la materia de solución de controversias en torno al hábitat y desarrollo urbano, que genera. En este marco y bajo bajo que invitan al debate y a la reflexión, comenzó a girar la rueda de puntos de vista, miradas objetivas y discordantes…

El grupo de investigadores – UNICEN-CONICET – nos aporta una mirada, sin solo académico-profesional, compromiso sino. El acceso al hábitat es un tema controvertido, desde el punto de vista de la organización social y de la forma en que la misma “ordena” las diferentes fricciones que se dan en torno al territorio, la propiedad privada, el rol del Estado y los actores demás sociales.

La mirada desde el conocimiento, la clarificación, no sólo es sólo es la fuente del desarrollo, sino sienta las principios que rigen el ordenamiento territorial y sus transformaciones; hablamos, en definitiva, de causas estructurales, que profundizan los rincones más profundos de un paradigma que: cada vez son más los barrios precarios y asentamientos urbanos de familias numerosas, que insurgen el conflicto por las tierras.

Este no es un problema “nuevo”; desde los años ’70 del pasado siglo, el acceso al hábitat es un atracción a nivel mundial que ha convertido a la vivienda, no ya en un valor de uso, sino en un valor de cambio. Existen datos que grafican este punto: último censo del INDEC nos dice que desde 2010 a 2022, ha agotado 10 puntos el número de inquilinos. En nuestra ciudad, el porcentaje de inquilinos en la 2001 era del 15%, para ser el 2022 del 29,8%, cifra que se duplica en lo que va del siglo

Similares se refleja en las categorías que explican el crecimiento de las viviendas vs la población. Cuento que entre el 2001 y 2021, la población creció un 33%, el número de viviendas lo hizo en torno al 97%. No hay solistas. Muestran la vulnerabilidad del inquilino, la inquilinización de parte de una sociedad, excluida, marginada; un universo explicado por madres solteras, sexuales (oprimidas), familias que conviven con animales, trabajadores y trabajadoras informales, etc. Sobre todo, porque, en definitiva, hay una tendencia hacia la consideración de que el derecho a la vivienda se erige sobre los cimientos del ámbito privado.

Patria Grande se hizo presente, con un referente de peso, que, además, conocer a la perfección el suelo del suelo urbano y la vivienda. Arrizabalaga sentencia, la crisis que se desnuda, en el centro del debate, es en realidad de apatía – del poder judicial, de la política, de la sociedad o una importante parte de ella – una insensibilidad que se materializa con un acto que duelo: gente en la calle, por falta de acceso (digno) suelo, a la vivienda.

El trasfondo es político, lo que hay que poner en discusión, primero, es la política y su mirada mez mez tendida de este problema. No es casualidad, sí es la primera vez que se da, que la FDT apoya un diseño; la intencionalidad política marca una agenda, pero también un sentido. Los polígonos del RENABAP son la misma afirmación de la determinación de la propiedad de la tierra.

Tandil ha última delceso de una ciudad de propietarios a una ciudad de inquilinos, de renta urbana, con una fuerte patrón agrario y con un mercado que se muestra con mayores atributos (interés) que el Estado Municipal; esto se da a partir de los 70, con la última regla de gobierno de facto, que dolariza la tierra y la vivienda; es que es crítica, y genera constante dependencia de elementos externos, por la que se entiende la razón de que se trancifica moneda en esos bienes que producen noimos… este punto, sin un estado presente, el mercado suimulto su mercado, trillado, pero no por menos efectivo. Frente a esto, se debe imponer normas regulaciones, regulaciones, integración, producción (de bienes y servicios públicos) … y esto, solo lo puede garantizar el propio Estado, no el mercado. Porque el problema, en Tandil, es estructural, de concentración de la tierra – no de déficit de tierras – , que se fortalece a medida que las regulaciones se debilitan en su implementación; un juego de suma cero, donde donde lo que se “pone” de un lado, se “quita” del otro

En Europa, cuna del progreso liberal, de la propiedad privada y del capital, la presencia del Estado en materia de regulación rentista es notoria. Sobre todo, porque se pone foco en la integración, para que se evierta las ciudades y su “desarrollo” las que expulsen; por eso existen leyes de barrios populares (RENABAP), lo que se busca es reducir es reducir los “desaparecidos domiciliarios”; también la mirada apunta a la inversión con el Estado al frente, la vivienda pública en alquiler genera integración socio socio-inclusión, a través del empleo, el consumo, la cercanía de los CAPS a los barrios, las sociedades de fomento, el deporte y la cultura. Se trata de espacios, de manera pro-positiva, para evitar que el narco-estado prospere, donde las instituciones dejan un lugar vacío.

El secretario de la Cooperativa Falucho, aborda la historia como punto de partida; Mansilla nos adelanta: es momento de la valoración de la cooperación conjunta,… cooperar para construir, no solo como lema, sino, también, como insumo básico para el progreso.

La historia enseña; antes de la existencia de la FoNaVi, el fondo para obras de vivienda, urbanización, infraestructura, servicios y equipamiento comunitario, la urbanización se dio de la mano de las cooperativas, se creó en cada base militar (Córdoba, Comodoro Rivadavia, Tandil), también de una Federación de Cooperativas de Vivienda. Este es el puntapié inicial del proyecto que se convirtió en Cooperativa Falucho.

Hoy hay sectores en pugna, en contraposición al pasado; el sector público, el privado y la situación social en puja constante. El debate central es de quién es la plusvalía.

Con el Estado solo, no alcanza, en este sentido: las cooperativas aportan con valores, con integración, pero, sobre todo, con progreso; un elemento central de la urbanización de la metrópolis – Berlín está construida, en un 30%, sobre la base del trabajo cooperativo.

Juan Duarte comienza con una máxima que define escenarios, y eso define escenarios, y eso sobre una realidad: la producción de suelo (urbano) está regida por el mercado; por eso es central la intervención del Estado. Los datos son indicadores, más allá de que a priori, solos. A lo largo de la historia reciente, el pirámide social en la Argentina, ha incluido la pobreza – con una amplia base del 56%, seguida de un medio del 40%, hasta llegar a la cúspide, del 5% más privilegiado. Pero eso no es todo, solo un 20% de la población de esa pirámide, tiene posibilidades en la actualidad, de llegar a la vivienda propia, ni la totalidad de los pobres, ni la más mitad baja de la clase puede media, hacer.

El primer gobierno de Perón adelante llevó a cabo una férrea política de regulación del mercado de alquileres (en un Buenos Aires donde el 80% eran inquilinos); es decir, que este asunto es tema de las decisiones políticas y abordar a fondo estas problemáticas de manera integrada, entre diferentes los niveles del Estado, Nacional, Provincial y, sobre todo, Municipal. Aquella primera política pública, nosistió consistió en generar urbano, suelo vivienda para los trabajadores, sino en regular un mercado desregulado.

El suelo es la mercancía que no tiene relación con el valor del mercado; la valorización por el Estado – la comunidad en su conjunto – y esta es la primera intervención virtuosa que un Estado debe tener; la segunda es la distribución de ese suelo urbano valorizado porque, sólo el Estado tiene los recursos para generar políticas públicas. Y, en este sentido, la participación de los Municipios en la valorización inmobiliaria es central, son la base de esas pirámide.

En Singapur, la meca del capitalismo moderno, el 100% de la tierra es pública; esto valoriza el desarrollo. Pero no hay valorización y distribución, en torno a la pulsión entre lo público y lo privado, si no hay un estado presente y regulador, sobre todo regulador, del mercado. Es que la mercancía es muy particular, tiene un alto especulativo de carga – y más por estas épocas, como “refugio” de inversión – por eso políticas públicas regulatorias deben ser robustas y continuas. Acompañadas de un esquema de financiamiento con créditos para un mercado inmobiliario empático y también con una mirada social.

Pensar para desarrollar

El debate enriquece por su contenido, pero también por su integridad y abordaje; una mirada retrospectiva y, a la vez de futuro.Es posible un desarrollo urbano consciente, sin la presencia del Estado? Con el mercado solo no alcanza, reza una frase con matriz trillada, lo que complementa es la política pública que se construye con empatía, solidaridad, pero (sobre todo) con decisión y voluntad política.

Pensemos juntos ejes de discusión y construcción socio-política en torno a:

  • Un adecuado cumplimiento de la PDT, reconstruyendo su vigencia normativa.
  • El resguardo de los polígonos RENABAP que garantiza las leyes de los barrios populares;
  • Instruir al poder político y al resto de los poderes a que obren en función del bien común, con el respaldo de lo público por los intereses del mercado.
“Para que triunfe el mal, sólo es necesario que los buenos no hacen nada. Edmund Burke